La humedad por condensación es un importante problema en las comunidades de propietarios, sobre todo porque ni el seguro comunitario ni el privado cubren la reparación y atención de daños ocasionados por este tipo de humedades.
La humedad por condensación es un fenómeno que aparece cuando la temperatura del interior de la vivienda es superior a la del exterior. Se puede mostrar de dos formas: como pequeñas gotas de agua en ventanas o como manchas negras de moho que aparecen en paredes y techos, generalmente.
La razón principal de su aparición es que no hay suficiente ventilación en la vivienda, aunque también puede deberse a causas estructurales del edificio como paredes con aislación insuficiente.
¿Cubre el seguro las humedades por condensación?
Prácticamente todos los seguros del hogar y comunitarios excluyen de sus pólizas las humedades de condensación ya que se consideran provocadas por mala ventilación o mal aislamiento.
Cuando se produce humedad por condensación que se cree que son por condensación, el administrador de fincas puede abrir parte al seguro para que el perito compruebe el origen pero, si se determina que son por condensación, el seguro se retirará y cerrará el expediente.
Es importante saber diferenciar si nos encontramos ante una humedad por filtración o por condensación. En el primer caso, se trata de una mancha visible, que no presenta el típico moho de la condensación y que puede filtrar agua (o estar seca porque es antigua). En este caso, puede deberse a la rotura de una tubería y sería importante arreglarlo cuanto antes.
Además, las humedades por condensación suelen presentarse en los meses de invierno u otoño, mientras que las filtraciones pueden producirse en cualquier momento.
¿Cómo evitar las humedades por condensación?
Lo primordial para evitar la humedad condensación es tener una buena ventilación en la vivienda.
Algunos tips que proponen nuestros expertos son:
- Abrir ventanas y balcones para ventilar bien todas las habitaciones de la vivienda al menos 10 minutos al día
- En el baño, abrir la ventana para ventilar después de una ducha. Si no hay ventana, dejar la puerta abierta y abrir la ventana más cercana
- Tender la ropa en el exterior
- Evitar colocar ropa mojada sobre los radiadores encendidos
- En la cocina, encender siempre que cocinemos el extractor de aire para evitar que se condense la humedad de ollas hirviendo, por ejemplo
Si necesitas ayuda con este u otros temas, ponte en contacto con nuestra administración de fincas en Zaragoza y te ayudaremos.